Van Bogaert Transport

L. Van Bogaert Transport ha invertido recientemente en varios camiones DAF XF nuevos. Gracias a la formación para conductores de DAF incluida con la compra, el conductor René Ryckaert ha podido perfeccionar aún más sus habilidades de conducción.

AMPLIA VARIEDAD DE REMOLQUES

L. Van Bogaert Transport lleva 85 años en activo, principalmente como transportista para la industria de la construcción. Sin embargo, René Ryckaert es una excepción dentro de la empresa, dado que normalmente se le ve conduciendo un camión con remolque con laterales de lona, el tipo que se utiliza a menudo para fines de distribución más tradicionales.

EMPEZAR DESDE CERO

"Al principio me quedé un poco sorprendido por tener que restablecer mi puntuación a cero para la formación de conductores de DAF. La conducción eficiente siempre ha sido mi pasión y no me hizo ninguna gracia tener que renunciar a todos los puntos que me había costado tanto ganar", declara René cuando piensa en la formación. Sin embargo, esto le brindó la oportunidad de aprender algunos trucos nuevos y, en última instancia, acabó muy satisfecho por haberlo hecho. "Mi puntuación ahora está de nuevo entre el 96 y el 97 %, una cifra bastante buena, y esto se debe principalmente al hecho de que ahora sé cómo puedo conducir mi camión de la manera más eficiente posible", explica René.

LA CONDUCCIÓN EFICIENTE COMO DEPORTE

René Ryckaert asegura que a veces conduce su camión de forma menos eficiente a modo de juego: "Solo para ver lo rápido que cae mi puntuación y ver cuánto tiempo se tarda en recuperar esos puntos porcentuales de nuevo. Esto me ayuda a recordar que conducir de forma eficiente es algo que se debe hacer de forma constante", lo que probablemente explica por qué este conductor de la empresa de Hamme (Bélgica) está siempre intentando mejorar sus porcentajes. "Es la única forma de mantenerse en forma, aunque también creo que es importante realizar este tipo de formación una vez cada dos años para seguir aprendiendo a conducir de forma eficiente", concluye René.